En un esfuerzo por cumplir con sus compromisos internacionales en materia de refugiados, inmigración y fuerza laboral, el Ministerio de Migración de Canadá (IRCC) ha presentado un nuevo programa piloto que bien podría tener potentes implicaciones para quienes desde otras latitudes buscan emigrar para trabajar en Canadá. El anuncio emitido por el titular de IRCC, Sean Fraser, promete la llegada del programa Economic Mobility Pathways Pilot (EMPP) que consolida lo expresado el pasado 27 de marzo por el propio Fraser.
EMPP anuncia tener dos grandes alas, la primera denominada EMPP Federal Skills Job Offer Stream, en la se abriría la puerta a los trabajos más exigidos por el working shortage canadiense, tales como profesionales de cuidados médicos, ingenieros de software, diseñadores web, ingenieros y técnicos en áreas como la mecánica y la electricidad, expertos en logística y almacenamiento, tursmo, hospitalidad y amenidades, así como transportistas y otras gamas de choferes.
La rama segunda, denominada como Federal Skills Without a Job Offer Stream, como su nombre lo avala, estará más enfocada en profesionales altamente calificados, pero que por condiciones varias se ven impedidos de poseer una oferta de trabajo antes de emigrar para trabajar en Canadá. Es decir, muy emparentado con las condiciones de refugiados económicos, políticos o emanados de conflictos bélicos y sociales.
Canadá abierto
Para nadie es secreto que Canada busca cumplir con ambiciosas metas de inmigración de cara al año 2025, y que quienes buscan emigrar para trabajar en Canadá pueden caber en esta búsqueda. En 2022 el país boreal recibió un aproximado de 46,500 refugiados provenientes de unos 80 países distintos.
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